FESTIVAL DE LIMA 2008: ASÍ FUE LA INAUGURACIÓN
Luego de cruzar un mar de calles rotas y seguir muchas señales de desvío, llegamos al Cine Metro en el centro de Lima, alrededor de las 7:30 p.m. La ceremonia se inició una hora después. Arrancó con la presentación del nuevo y principal auspiciador del festival, la compañía de perfumería Natura. Ellos presentaron un video cuya temática giraba alrededor de la idea de una “América sin fronteras”, un clip plagado de divertidas anécdotas y personajes singulares que demostraron la absurda naturaleza de las divisiones fronterizas entre países. Vale como esfuerzo audiovisual, aunque más de uno puede verlo como simple publicidad encubierta. A continuación subieron al estrado los directivos de la mencionada Natura, del BIF y de El Comercio, los auspiciadores principales, todos intercalados con la proyección de los spots promocionales. Luego de ellos recién apareció un representante del festival, Edgar Saba, quien leyó su discurso de rigor. Finalmente, el rector de la PUCP, Luis Guzmán Barrón, dio por inaugurado el evento.
La ceremonia continuó con la vistosa y contundente presentación de La Sarita y sus danzantes de tijeras. Luego llegaría el plato de fondo, la presencia de Angie Cepeda saludando cariñosamente al homenajeado de este año, Mario Vargas Llosa, quien recibió agradecido el merecido aplauso general, y de pie, del público (un público que a lo largo de la noche celebró todo lo que se le puso enfrente, cada nombre que aparecía en el ecran, cada discurso que terminaba, o cada video que se proyectaba recibía muchos, demasiados, aplausos). Se presentaron además una pequeña entrevista con el novelista, acompañada con fotografías del recuerdo, una escena de Pantaleón y las visitadoras, y una sentida carta personal que le envió la veterana actriz argentina Norma Aleandro.
Para terminar la ceremonia tenía que llegar la película inaugural, esta vez fue la cinta mexicana La zona. Con ella recordamos la pésima calidad del sistema de audio del viejo Cine Metro. Esta sala, que se ha recuperado para eventos importantes como éste, aún no está lista para proyectar películas, mucho menos en el marco de un festival. Es prácticamente imposible seguir la historia si no se pueden distinguir los diálogos, así que a la media hora de proyección decidimos que ya había sido suficiente por esta noche. La película no se presentaba particularmente atractiva desde un principio, pero mejor será verla en condiciones más apropiadas. En mi caso, será el domingo en Cineplanet San Miguel.
Esa fue la fecha inicial de este duodécimo festival. Va uno, restan ocho días.
Viernes, 8 de agosto del 2008